PLANOS CONTRAPICADOS O DE ÁNGULO BAJO
Plano contrapicado
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Un plano de ángulo bajo es cualquier plano en el cual se inclina la cámara hacia arriba para ver al sujeto. Un ángulo bajo no significa necesariamente una visión de gusano del escenario o la acción. Ni implica que la cámara esté colocada por debajo del nivel visual del operador. Se puede hacer un plano de ángulo bajo de un insecto, un edificio o un bebé. En algunos casos puede ser necesario colocar a un intérprete o un objeto en un pedestal para hacer posible que el sujeto aparezca más alto en relación a la cámara. Se puede situar la cámara en un agujero o debajo de un suelo falso, para conseguir la suficiente distancia focal en relación con el sujeto. Se deberían usar los planos bajos cuando fuera deseable inspirar respeto o excitación; aumentar la altura o velocidad del sujeto; separar a los intérpretes u objetos; eliminar primeros términos no deseados, el horizonte o el fondo; distorsionar las lineas de la composición y crear una perspectiva más potente; situar a los intérpretes u objetos contra el cielo e intensificar el impacto dramático.
La filmación hacia arriba desde un ángulo bajo de estos hombres picando piedra sitúa a los obreros contra el cielo con una mayor separación que si son filmados con una cámara a su nivel contra el fondo rocoso de la cantera. |
Compañía Cosechadora Internacional. Un plano de ángulo bajo de un tractor en funcionamiento le hace aparecer más alto y grande según avanza hacia la cámara. |
El ángulo bajo sitúa al sujeto contra el cielo y produce verticales inclinadas. Combinado con el movimiento del tren, esto añade sensación de riesgo al plano. |
Aeroespacial Weber. El estudio del desarrollo de un proyecto de ingeniería utiliza el plano de ángulo bajo de una tripulación de maniquís preparada para un lanzamiento de prueba del asiento a propulsión de una nave espacial. |
Los planos de ángulo bajo de arquitectura u objetos religiosos, tales como un crucifijo o el interior de una iglesia, pueden inspirar respeto en el público, porque se coloca al espectador en un lugar más bajo desde el que ha de mirar hacia arriba, hacia el símbolo del Todopoderoso. El mismo efecto es útil cuando se filman personajes importantes tales como un presidente, un juez o un ejecutivo de una compañía.
Los ángulos de cámara baja también son útiles cuando un intérprete debe mirar hacia arriba a otro actor que domina la historia en ese momento. Esto funciona especialmente bien con los planos de punto de vista, porque el público se identifica con el intérprete más bajo y se implica emocionalmente con su problema. Un intérprete que es tumbado en una pelea u otro que ha de esperar la sentencia de un juez se encuentran humillados en algún sentido y mirarán hacia arriba a su oponente o símbolo de autoridad.
La estrella o personaje dominante en una escena puede destacar de un grupo si se le sitúa ligeramente adelantado de los otros y se le filma desde un ángulo bajo. Este simple truco dará al intérprete mayor prominencia y le permitirá dominar el suceso. A veces el efecto es más dramático si el actor camina hacia delante durante la escena coincidiendo con un aumento de la acción dramática o la aparición de diálogo importante.
Un ángulo bajo es excelente para acabar una escena con un primer plano de reacción contra el cielo u otro fondo que no sea descriptivo. Eliminar el horizonte del encuadre evita toda referencia al fondo y permite filmar estos primeros planos casi en cualquier sitio y en cualquier momento. Muchos problemas de montaje, tales como un salto entre dos planos que suele descubrirse más tarde, cuando se monta la película, pueden solucionarse fácilmente insertando primeros planos de reacción de ángulo bajo, sin que sea necesario que concuerde el decorado o volver a una localización al aire libre en particular.
Los ángulos bajos hacen que la gente, los objetos y las estructuras se eleven dentro del encuadre porque son filmados con una amplia base y una perspectiva en disminución. El empleo de objetivos de ángulo amplio enfatiza aún más el efecto óptico. Sin embargo, cuando se filma a un actor desde un ángulo bajo con un objetivo de ángulo amplio se debe tener cuidado de no convertirlo en una caricatura.
Se puede aumentar la altura y el dominio tanto de las estructuras naturales como de las hechas por el hombre filmándolas en contrapicado hacia arriba. Los rascacielos, las torres de iglesia y las montañas se pueden beneficiar de tal tratamiento. La distorsión inherente en este tipo de filmación es aceptable, porque los espectadores están condicionados a ver las perspectivas fotográficas inclinadas y darse cuenta de que las líneas convergentes son paralelas. En realidad, una persona que mira hacia arriba desde la misma base de una estructura alta tiene una impresión similar a la producida por la cámara.
Raramente se filman los interiores de estudio en ángulo bajo en películas de ficción porque los decorados son generalmente construidos sin techos para permitir la iluminación por encima de las cabezas de los actores. Sin embargo, las localizaciones interiores de edificios reales pueden utilizar techos si aportan efectos dramáticos adicionales al decorado o a la historia. Los planos de ángulo bajo de actores contra el techo esculpido de una iglesia, el techo de una posada colonial con vigas de madera, o el techo de una biblioteca con cúpula de cristal los presentarán contra fondos inusualmente pintorescos, uniéndolos al decorado.
Un plano estático de ángulo bajo de un grupo de actores que avanzan puede aportar introspección dramática, si entran desde el fondo del encuadre y se acercan a la cámara. Un ejército que avanza puede así parecer ascender contra un cielo nublado según ellos marchan hacia adelante y aumentar en estatura y número según van desfilando. Se puede tratar a un solo actor de esta manera tanto como una introducción o durante una secuencia en la que se acerque a otro actor en una actitud dominante. Los autos, los camiones y otros vehículos pueden ser igualmente tratados.
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