EL EQUILIBRIO
Este plano es pictóricamente interesante porque el camión cisterna está al fondo enmarcado por el ala del avión. Perdería interés si el avión y el camión cisterna fueran rodados de perfil, en línea recta a lo ancho de la pantalla. Aeroespacial Weber. El material de documentales, como esta prueba del asiento a propulsión de una cápsula espacial de alta velocidad con maniquís teledirigidos, puede componerse formalmente cuando dos objetos son de igual interés. |
Producciones Harann. El equilibrio de la composición formal ha de ser utilizado para describir escenas estáticas pacíficas y tranquilas, como esta joven herida, que es reconfortada por sus padres. El tratamiento de iluminación y de cámara más sencillo puede mostrar mejor los sucesos pacíficos. |
Se utiliza el equilibrio informal en los primeros planos porque se ha de situar al sujeto ligeramente descentrado para ofrecer más espacio en la dirección de la mirada. |
Se emplea generalmente el equilibrio formal en los planos a dos de chico y chica. El interés del público saltará de un actor a otro según estos hablan o interpretan una acción significativa por turnos. El actor que ha de dominar la escena no está situado en la misma línea horizontal que el actor inferior. Si colocamos a la monja a la derecha del encuadre y más elevada que la figura sentada, tendremos un tratamiento compositivo más fuerte. |
La gravedad influye en el equilibrio. Las grandes estructuras han de tener bases pesadas, como una escalinata. El sombreado del follaje ayuda a fragmentar una gran área en primer término. |
Si todas las fuerzas son iguales o compensadas se dice que están en equilibrio. Una persona o un objeto desequilibrado normalmente acaba cayendo. Así pues, el equilibrio físico está influido por la ley de la gravedad, las fuerzas compensatorias y el poder de atracción.
La falta de equilibrio molesta al espectador porque altera sus sensaciones y crea intranquilidad en el cerebro. Por esta razón algunas películas pueden no parecer bien equilibradas. Una composición adecuadamente equilibrada es subconscientemente agradable porque los diversos elementos están combinados formando una imagen aceptable. En ocasiones especiales el operador puede desear molestar al espectador y pretendidamente presentar una composición desequilibrada. Normalmente se ha de presentar el plano de forma que se observen las leyes del equilibrio.
Se puede complicar o favorecer el equilibrio pictórico en la composición cinematográfica con el movimiento de cámara y/o actores. Si movemos actores o vehículos, o panoramizamos, picamos o hacemos travelling, hemos de componer continuamente según la escena avanza. El equilibrio compositivo de las películas es una serie de compromisos pictóricos basados en las posiciones clave de los actores y en las pausas de la acción cuando los elementos se hayan inmóviles.
Los planos estáticos requieren un mejor equilibrio que los planos en movimiento, en los que la acción atrae la mirada del espectador sin tener en cuenta los errores compositivos.
El equilibrio real tiene que ver con el peso físico. El equilibrio pictórico se preocupa del peso psicológico, que está influido por la atracción ocular relativa de los diversos elementos compositivos de la imagen. Cada elemento atrae de acuerdo con su tamaño, forma, valor tonal, color, movimiento, dirección, contraste con sus alrededores y situación dentro del encuadre. Se puede considerar el equilibrio como una balanza o un subibaja. Un gran objeto estático a un lado del plano puede, de esta forma, hallarse compensado por otro pequeño objeto en movimiento en el lado opuesto, como un diminuto coche acercándose a una gran montaña, porque ambos tienen igual peso pictórico o psicológico.
La situación de un elemento compositivo dentro del encuadre influye en su peso. Una persona u objeto situado junto al centro del encuadre posee menos peso compositivo que otra cerca del lateral, porque ejerce menos influencia en el subibaja y no puede inclinarlo hacia ningún lado. Así pues, se ha de alejar del centro un elemento con un peso más ligero, mientras que los que son más pesados han de estar situados junto al centro, si queremos tener una imagen equilibrada. Si colocamos un elemento pesado demasiado cerca del lado del encuadre desequilibraremos la composición y haremos que se derrumbe visualmente.
Se han de considerar los siguientes factores de peso compositivo tomando como base que todos los otros factores son iguales:
Un objeto en movimiento posee más peso que un objeto estático. Esto es aplicable sea cual sea su tamaño. Un objeto relativamente pequeño en movimiento, especialmente si es de tono claro, colores brillantes o aparece contrastado sobre el fondo, captará más atención que un gran objeto estático. Un objeto que se acerca a la cámara se hace progresivamente más grande y, por lo tanto, tiene mayor peso que un objeto que se aleja y por lo tanto disminuye en tamaño.
La parte superior de una imagen es más pesada que la parte inferior, porque un objeto alto parece más pesado que un objeto bajo.
Como los ojos de la mayoría de los espectadores automáticamente se mueven hacia la derecha, el lado derecho del encuadre puede obviamente atraer y mantener más atención que el izquierdo. De esta manera, el lado izquierdo de una imagen puede soportar mayor peso pictórico que el derecho.
Un objeto aislado posee más peso que un objeto dentro de una multitud o mezclado con otros. Esto sucede tanto si dicho aislamiento se consigue por su posición, iluminación, contraste, color o cualquier otro factor.
Un objeto parece más pesado si se sitúa en el lateral del encuadre, ya que el centro de la imagen es compositivamente la parte más débil.
Un gran objeto en un plano estático tiene más peso porque tiende a dominar la imagen sin tener en cuenta la posición u otros factores.
Los objetos de formas regulares tienen más peso que los de formas irregulares.
Los objetos peculiares, complejos o intrincados pueden parecer más pesados por el interés adicional que generan.
Un objeto compacto, con masa concentrada alrededor de su centro, tiene más peso que otro con la masa dispersa.
Un objeto formado verticalmente parece más pesado que un objeto oblicuo.
Un objeto brillante posee más peso que uno más oscuro. Un objeto de tonos claros parece acercarse al espectador, mientras que otro más oscuro parece alejarse hacia el fondo. Así pues, una área negra ha de ser mayor que una blanca para compensar. Una superficie brillante parece relativamente más grande que una oscura, a causa de su efecto de irradiación.
Los colores cálidos, como el rojo, son más pesados que los fríos, como el azul. Los colores brillantes tienen más peso que los oscuros.
TIPOS DE EQUILIBRIO
EQUILIBRIO FORMAL o simétrico. EQUILIBRIO INFORMAL o asimétrico.
EQUILIBRIO FORMAL
Se produce el equilibrio formal cuando ambos lados de una composición son simétricos, o tienen igual atracción. El equilibrio formal es normalmente estático, inerte, sin fuerza, conflicto o contraste. Una imagen formalmente equilibrada sugiere paz, igualdad y tranquilidad. Una cruz, un juzgado o una escena pas-
toral deberían estar formalmente equilibradas porque normalmente son éstas las cualidades que les otorga el espectador. Se deberían filmar estas escenas casi fron-talmente, con poca o ninguna angulación de cámara, para que los elementos pictóricos a cada lado tuvieran un tamaño de imagen similar. Las composiciones formalmente equilibradas no deberían ser llamativas; sus valores tonales, colores, iluminación y contraste deberían ser sutiles.
Se emplea el equilibrio formal en el popular plano a dos de perfil, en el que dos actores están situados en lados opuestos del encuadre, mirándose el uno al otro. El poder de atracción cambia de un actor a otro según éstos hablan por turnos. Como cada actor tiene igual importancia pictórica, es el diálogo, la expresión facial o cualquier otra acción lo que atrae la atención del público. Es posible desequilibrar tales planos a dos formalmente equilibrados favoreciendo a un actor con una mejor iluminación o angulación, un atuendo de colores brillantes, una mejor separación del fondo o con cualquier otro truco compositivo descrito en este capítulo. De esta manera, la oposición, fuerza y conflicto pueden ser el resultado de una composición por otra parte tranquila.
EL EQUILIBRIO INFORMAL
Se produce el equilibrio informal cuando ambos lados de la composición son asimétricos, o de diferente atracción. El equilibrio informal es dinámico porque presenta una disposición llena de fuerza de elementos compositivos opuestos. En una imagen informalmente equilibrada una persona u objeto dominante se convierte en el centro de interés. Como contraste u oposición podemos tener una persona u objeto secundario de igual peso compositivo al otro lado del encuadre. Los elementos compositivos de diferentes formas, tamaños, valores cromáticos o tonales, o temática estática o en movimiento pueden, de esta forma equilibrarse los unos a los otros porque ambos lados de la imagen son de igual peso compositivo. Se emplea el equilibrio asimétrico de forma sutil en los primeros planos, en los que un sólo actor llena el encuadre, co-
locando la cabeza ligeramente descentrada, con lo que se deja ligeramente más espacio en la dirección en que mira el actor.Por asociación con el actor, objeto o acción fuera de la pantalla con el que se relaciona el actor, la mirada tiene suficiente peso para compensar la posición descentrada de la cabeza. Así pues, se equilibra al actor en pantalla con otro fuera de pantalla invisible.
El método más simple para crear composiciones asimétricas es pensar en un subibaja con un lado más pesado que el otro. El lado pesado es la persona u objeto significativo, el centro de interés de la escena. Este elemento compositivo dominante debe tener un elemento opuesto al otro lado del encuadre para equilibrar la composición de la escena.
Un elemento compositivo opuesto más pequeño puede compensar su falta de tamaño con el peso adicional que puede ofrecer su posición, forma, brillo, movimiento o valor cromático. Como el movimiento crea un mayor interés en una escena de película, las figuras o vehículos más pequeños en movimiento tienen mayor peso compositivo que los objetos estáticos mucho más grandes tales como los edificios, árboles o montañas. Por lo tanto, el centro de interés puede ser un pequeño barco que entra en un gran puerto. No sólo se debería considerar el tamaño físico a la hora de escoger un elemento compositivo dominante. El movimiento también es importante. No se debería situar el elemento dominante en la misma línea horizontal que el elemento opuesto con menos peso, sino que debería estar ligeramente más o menos elevado, preferiblemente más, para que demostrase mayor peso y atrajera la atención. Por consiguiente, un actor dominante debe aparecer más alto que los actores secundarios. Si está situado por debajo de ellos, o sentado, dominará la escena con una mejor iluminación o posición, o incluso captará la atención con las miradas de los otros dirigidas hacia él. Todo esto creará un punto de atracción dominante, pero, por otra parte, si colocamos al actor dominante a la misma altura compositiva que otro actor menos importante quitaremos fuerza a la escena. Se puede conseguir una buena posición en profundidad colocando al actor elegido un poco más avanzado que los otros para hacerle parecer más elevado, o situarlo más atrás para que parezca inferior.
EL EQUILIBRIO INFORMAL CON NÚMEROS IMPARES
Un método sencillo para crear equilibrio informal es componer con números impares de actores u objetos. Un número impar de elementos pictóricos, especialmente tres, puede ser colocado de tal manera que un solo elemento domine a los restantes. Los números impares también facilitan una disposición desigual de los elementos pictóricos; lo cual permite situar el elemento dominante a un
lado del encuadre, o en la parte superior o inferior del mismo, creando así un composición triangular. El dominio puede pasar de un actor a otro según avanza la escena, cambiando las posiciones, o haciendo levantarse a un actor si todos los otros están sentados, o haciéndole adelantarse. Se puede dar a un actor importante un ángulo de cámara por debajo del nivel de la vista colocándolo a la derecha del encuadre, mirando hacia la izquierda. El lado derecho tiene más peso pictórico. El lado izquierdo es más neutro.
Todo esto no implica que todas las disposiciones deberían consistir en números impares de actores con el actor principal en el vértice de una composición triangular. Se han de usar variaciones de este tema siempre que sea posible. El personaje dominante no ha de ser compositivamente más fuerte durante todo el plano o secuencia. Puede cambiarse esta dominancia por medio del movimiento de la cámara, del mismo actor o de los otros actores. De esta forma se puede captar el interés del público sólo cuando sea necesario, como cuando se esté diciendo un línea importante de diálogo o llevando a cabo un acción significativa.
LA GRAVEDAD INFLUYE EN EL EQUILIBRIO
Los sentidos humanos se rebelan ante las composiciones que desafían las leyes de la gravedad. Los elementos compositivos pesados que se eleven mucho hacia el cielo habrán de tener un centro de gravedad bajó, o parecerán estar a punto de volcarse. Una estructura alta ha de estar apoyada en un base amplia, preferiblemente oscura, para equilibrar el efecto visual de una parte alta muy pesada. Para equilibrar edificios u otros elementos compositivos fuertes, se ha de sombrear una área relativamente extensa de la parte inferior delantera, o se ha de iluminar con luz filtrada a través de ramas de árboles. En tales casos, se han de evitar las grandes áreas de pavimento iluminado por el sol, por eliminación o bajando la cámara para reducir dicha superficie.
La gravedad también influye en el movimiento: un globo asciende hacia arriba, un objeto cae hacia abajo, el agua fluye colina abajo (preferiblemente con un movimiento de superior izquierda a inferior derecha), y un hombre escala montaña arriba (preferiblemente con un movimiento de inferior izquierda a superior derecha).
Se puede crear una composición desequilibrada desafiando las leyes de la gravedad, utilizando elementos sin base. Se puede utilizar un edificio elevado que atraviesa el encuadre en diagonal, o planos de personajes, objetos o estructuras descritos en diagonal con una angulación inclinada holandesa, que crea imágenes desequilibradas, cuando el guión requiere violencia, miedo, pánico o efectos impresionistas.
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