La unidad compositiva y el centro de interés
Aunque a la izquierda del encuadre y más baja, la mujer domina el plano de arriba porque está mejor iluminada y angulada más favorablemente hacia la cámara. Esta escena de lucha forma una escena triangular invertida con el actor dominado en el vértice inferior. Un ángulo de cámara bajo y un enfoque selectivo hacen que el actor en primer término sobresalga nítidamente de los actores secundarios al fondo, que se encuentran más abajo en el encuadre. Estudios Universal. Un número impar de actores, preferiblemente tres, puede estar equilibrado informalmente con un único centro de interés, como la actriz en este plano a tres, que está más abajo y mejor iluminada que los otros actores. |
El encuadramiento de actores en primeros planos puede variar si se equilibra con otros objetos. Las velas situadas más altas a la derecha permiten un encuadre de la cabeza de la actriz más abajo a la izquierda.
El actor sentado es el centro de interés en este plano bien iluminado, compuesto con sencillez y angulado eficazmente. La posición del actor, la composición y la iluminación atraen la atención de los espectadores hacia la figura dominante sentada. El actor de la izquierda está dominado al estar peor iluminado y angulado de espaldas a la cámara. |
Un actor puede permanecer semioculto al fondo oscuro de una habitación hasta que se acerca a la luz. La iluminación con partes contrastadas permite al actor moverse entre áreas de luz y sombra. |
El actor en el centro está en el vértice de una composición triangular, escenificado en profundidad. Domina la escena hasta que el actor de la izquierda sube los escalones, aunque no le veamos porque va encapuchado. El centro de interés de un plano puede cambiar mediante el movimiento de los actores. De esta forma puede cambiar el interés del espectador de un actor a otro, según varía el interés dramático. Tales acciones también son reforzadas por las miradas de los otros actores. |
LA UNIDAD
La chica domina la escena porque está más abajo, situada a la derecha y angulada hacia la cámara, más fuerte compositivamente. El movimiento ascendente de estos cazas a propulsión es reforzado al volar en formación diagonal. Esto crea una línea de transición en el espacio de inferior izquierda a superior derecha. |
La mujer domina este plano a dos equilibrado informalmente porque está situada a la derecha, mejor iluminada y angulada favorablemente hacia la cámara. El público es también dirigido hacia la chica por la mirada del hombre.
Es más fácil de conseguir el equilibrio informal con un número impar de actores o elementos pictóricos. Aunque los marinos están dirigiendo este submarino nuclear, el oficial de pie entre ellos está obviamente al mando, porque domina lo composición triangular. Se refuerza este efecto al estar el oficial vestido con colores claros, lo cual añade interés pictórico. Atraeremos la mirada de los espectadores hacia el actor dominante en un plano a dos siempre que le demos una posición compositivamente más fuerte, como una mejor angulación, una iluminación más favorable o, una acción o un diálogo más dramático. Las escenas de disturbios, pánico, catástrofes u otros sucesos violentos pueden utilizar varios centros de interés desperdigados como estas personas corriendo en diferentes direcciones. El lado izquierdo del encuadre puede aguantar un peso compositivo mayor, con lo que este operador de radar está adecuadamente situado a la derecha en oposición con la masa mayor a la izquierda. |
Un actor puede asumir el dominio de un grupo levantándose, mientras los otros permanecen sentados. |
El interés del público se centrará en el actor al teléfono, porque las imágenes nítidas atraen más la atención. |
Una imagen posee unidad cuando todos los elementos cinemáticos incorporados a la escena están perfectamente integrados. Se debe conseguir la sensación y atmósfera deseadas con una utilización apropiada de la línea, la forma, la masa y el movimiento; la iluminación, el movimiento del actor y/o la cámara; los valores tonales; las combinaciones de color, el tratamiento fotográfico general; y el montaje. Los muchos elementos técnicos, estéticos y psicológicos deben estar correlacionados para crear una descarga emocional única. La mezcla de efectos cinemáticos no correlacionados da como resultado una discordancia que debilitará la narración.
QUE HACER Y QUE NO HACER
Combine las líneas horizontales largas, el estatismo o las panorámicas lentas, la iluminación suave, los intérpretes estáticos o moviéndose lentamente y los planos largos para inspirar una sensación de paz y tranquilidad. No rompa este efecto inclinando la cámara hacia arriba o permitiendo un movimiento actoral rápido o haciendo un montaje corto y rápido.
Compañía Lockheed-Calihrnia. El movimiento ascendente de estos cazas a propulsión es reforzado al volar en formación diagonal. Esto crea una línea de transición en el espacio de inferior izquierda a superior derecha.
Componga con una serie de altas columnas verticales frente a un juzgado de una manera dignificadora con una composición estática simétrica. No destruya el efecto panoramizando horizontalmente sobre las columnas verticales.
Aumente el efecto de acción de escaladores, pilotos de coches de carreras o soldados desfilando, diseñando dicho movimiento de manera que los ojos del espectador se muevan en diagonal.
Filme el grácil movimiento de un esquiador haciendo eses montaña abajo siguiéndolo con un movimiento de cámara curvilíneo.
Emplee ángulos de cámara holandeses, composiciones dinámicas, iluminación dramática y un montaje rítmico para crear un efecto de desequilibrio e inestabilidad en cualquier hecho extraño o violento.
No emplee ángulos de cámara inusuales, movimientos del fondo que distraen o iluminaciones expresionistas en escenas sencillas con diálogos importantes que requieren una mayor atención auditiva que visual.
Esfuércese siempre por preservar la unidad de estilo a lo largo de una secuencia.
UN CENTRO DE INTERÉS
Una imagen ha de mostrar un solo centro de interés. Dos o más figuras, objetos o acciones igualmente dominantes compiten entre sí por la atención del es-
pectador y debilitan la efectividad de la imagen. Un plano a dos puede parecer una excepción a esta regla, pero no lo es. Cada vez domina un actor en un plano a dos cuando habla o realiza una acción más significativa. También se puede favorecer a un solo actor en un plano a dos de cualesquiera de las formas comentadas anteriormente. Así el ojo será atraído por un solo actor por su diálogo o sus acciones, o por un tratamiento de cámara, composición o iluminación más favorable para éste.
Se ha de atraer siempre la atención del espectador hacia la parte más significativa del plano. Esto no implica que una acción en primer término y otra al fondo no puedan ocurrir simultáneamente, o que varias, o incluso cientos de figuras u objetos no puedan aparecer en un único plano. La acción al fondo debe complementar la del primer término de modo que aporte el decorado y la atmósfera para los actores principales sin competir con ellos.
Un elemento compositivo dominante no necesita consistir en una sola figura u objeto. Pueden ser varias figuras, o cualquier combinación de figuras entremezcladas, que pueden fundirse en un grupo unificado. Los grupos de actores, árboles, edificios, o soldados desfilando, un escuadrón de aviones o varias máquinas pueden formar un solo centro de interés compositivo. Un tratamiento impositivo preferencial subraya las partes significantes de la imagen.
Hay ocasiones en que se pueden justificar varios centros de interés dispersos; tales como en escenas de batallas, peleas, pánico, catástrofes y otras acciones que impliquen hechos turbadores, desequilibrados o violentos. Por ejemplo, los miembros de un grupo unificado de actores pueden dispersarse en todas direcciones en una escena de una multitud, o los aviones de un escuadrón pueden separarse hacia sus diferentes objetivos en tierra.
SITUAR EL CENTRO DE INTERÉS
El centro de interés debe situarse en raras ocasiones en el centro de la imagen. Una cruz, una antena de radio o televisión, o cualquier objeto que radia igualmente en todas direcciones, serían las contadas excepciones. Preferiblemente el centro de interés estará al lado derecho dominante del encuadre. Sin embargo, si hacemos de esto una regla fija, tendremos como resultado monotonía visual.
Un método sencillo y eficaz de situar el centro de interés en una parte dominante de la imagen es dividir el encuadre en tres partes iguales, primero verticalmente y después horizontalmente. Estos cuatro puntos donde las líneas se cruzan son compositivamente fuertes. Como regla fija, esto nos dará como resultado una serie de centros de interés mecánicamente compuestos, siempre situados en lugares similares en la imagen. Como una regla adaptable, evitará que dividamos la imagen vertical, horizontal o incluso diagonalmente, lo cual tiene como resultado composiciones visualmente anodinas.
Por ejemplo, no se ha de centrar el horizonte en el encuadre, porque divide la imagen en dos partes iguales. El cielo puede ocupar un tercio o dos de la imagen, pero nunca una mitad del encuadre. Hay ocasiones en que el horizonte debe estar completamente fuera del encuadre, tales como en un plano de ángulo bajo contra el cielo, o un plano de ángulo alto mirando hacia abajo. O, el horizonte puede ser una fina línea que vaya a lo largo de la parte inferior del encuadre, como en un plano de una puesta de sol.
No se debe centrar verticalmente un poste de teléfonos, un árbol o un objeto similar,o éste dividirá la imagen en dos partes iguales. Una línea diagonal, tal como la ladera de una montaña, no debe ir de una esquina del encuadre a otra, o creará dos partes iguales. El elemento dominante debe ser colocado de forma que mire hacia dentro, hacia el centro de la imagen. Si encuadramos esta figura ligeramente en la dirección en que mira, la colocaremos ligeramente a un lado de la imagen.
Se ha de dividir el encuadre de manera que las líneas prominentes -horizonte, edificios, árboles, columnas, ventanas, puertas, grandes lámparas- sean situadas para atraer la atención hacia un punto compositivo fuerte. Son mejores las divisiones de números impares, preferiblemente tercios. Sin embargo, se han de alternar los puntos de cruce para que el centro de interés tenga lugar en posiciones «irregulares» en el encuadre en escenas diferentes.
Los elementos pictóricos principales no se han de componer con monótona regularidad. Muchos operadores descubren qué consideran una disposición compositiva satisfactoria y se mantienen fieles a ella. Esto puede tener como resultado una similitud compositiva de plano a plano, aunque cambie el argumento o el tema.
Variando la situación del horizonte o del centro de interés, y diversificando el movimiento de actores y cámara, las composiciones de los diferentes planos no parecerán repetitivas.
ATRAER O CAMBIAR EL CENTRO DE INTERÉS
Se puede atraer o cambiar el interés del público durante una escena por medio de:
LA POSICIÓN, EL MOVIMIENTO, LA ACCIÓN Y EL SONIDO.
LA ILUMINACIÓN, LOS VALORES TONALES Y LOS COLORES.
EL ENFOQUE SELECTIVO.
LA POSICIÓN, EL MOVIMIENTO, LA ACCIÓN Y EL SONIDO
El actor, objeto o acción significativo puede atrapar y mantener la atención del público al ser colocado en la parte más dominante de la composición, o pasando a la mejor posición según avanza la escena. O, puede atraer la atención al ser aislado de los otros actores o al alejarse de ellos durante la escena. Un actor también se puede mover para conseguir un mejor contraste con el fondo. O, un actor puede levantarse o avanzar, aumentando así su altura o tamaño relativo dentro del encuadre. Un movimiento repentino por parte de un intérprete anteriormente inactivo puede despistar o sorprender al público, con lo que este actor se convierte en el centro de interés de la escena. O, un intérprete puede actuar violentamente; golpeando la mesa con el puño, abofeteando a otro actor, o sa-
cando un cuchillo o un revolver. Un actor puede cambiar de dirección, con lo que contrastará con el movimiento de los otros intérpretes. O, un actor puede adquirir preponderancia avanzando y oscureciendo a otros actores. El actor principal puede ganar dominancia por medio de un uso efectivo del sonido: hablando más alto o incluso gritando, silenciando a los otros para que sólo se le oiga a él, o haciéndole decir las frases más dramáticas.
ILUMINACIÓN, VALORES TONALES Y COLORES
Los ojos del espectador son atraídos normalmente por la parte de una imagen más brillantemente iluminada, la de tonos más suaves o la de colores más vivos. Se puede explotar esta atracción ocular para conseguir que el actor principal sea el centro de interés con un vestuario más claro o colorista, o una mejor iluminación. En raras ocasiones es necesaria una gran imagen de pantalla, ya que incluso un objeto relativamente pequeño atraerá la atención con un tono más suave o unos colores más chillones que los objetos que lo rodean. Esto es debido al contraste que se crea con lo que lo rodea. Un objeto más luminoso avanza desde un fondo más oscuro «hacia» el espectador. Así pues, es importante tener en cuenta que un actor o un objeto subordinado no robe protagonismo erróneamente con estas ventajas.
Se puede utilizar el movimiento del actor o la cámara para que un actor principal se mueva hacia un área más iluminada, para aumentar el énfasis dramático durante la escena. Por lo tanto, el actor puede permanecer en segundo plano, incluso si está vestido con ropas claras o de colores, hasta que se mueve hacia la luz. Por supuesto que tal movimiento ha de ser cronometrado para que coincida con la acción significativa para el público. La iluminación en planos contrastados permite que el actor se mueva entre áreas iluminadas y oscuras. Al aire libre esto se puede conseguir con áreas de sombra creadas con ramas de árboles, follaje, edificios, etc. En los decorados de interiores se crean áreas de luz y oscuridad, simulando pequeñas fuentes de luz procedentes de lámparas o ventanas individuales.
EL ENFOQUE SELECTIVO
Una forma muy efectiva de atraer la atención del espectador hacia el centro de interés es el enfoque selectivo, que presenta al sujeto significativo nítidamente y el resto de la imagen ligeramente fuera de foco. El ojo humano siempre buscará la imagen más nítida, en preferencia a la imagen fuera de foco. Así pues, un actor o un objeto tendrá mayor atracción ocular si es la parte más nítida de la imagen.
Las técnicas de filmación modernas requieren que sólo esté nítida la materia pictórica de significancia narrativa. La profundidad de campo ilimitada es raramente necesaria en las películas de ficción. Los primeros planos y los planos medios aparecen generalmente nítidos sobre un fondo ligeramente desenfocado en las películas dramáticas. El fondo se desenfoca progresivamente según la cámara se acerca al primer plano. Tal caída gradual de la nitidez del fondo será escasamente perceptible si la acción descrita en primer término es suficientemente interesante para mantener la atención.
Leave a reply